
Ninguna propuesta de intervención o innovación estaría completa sin prever cómo valoraremos los resultados que esperamos obtener. Sin embargo, en esta propuesta la evaluación tiene como intención adicional generar un modelo de información para la decisión basado en indicadores, cuestión que convierte esta evaluación en un proyecto de investigación en sí misma.
Para ello partimos de la configuración de un Sistema de Información Geográfica (GIS) que contiene una base de datos con todos los indicadores estadísticos oficiales disponibles, incluyendo las estadísticas experimentales del INE, así como todos los servicios públicos y los principales servicios privados que estén disponibles en cada uno de nuestros municipios y núcleos de población. Este sistema de bases de datos será actualizado anualmente y constituye por sí mismo un excelente sistema de indicadores de partida, así como un instrumento de información para la decisión.
Para la valoración del éxito de las intervenciones en los Living Lab seleccionaremos un conjunto específico de indicadores cuantitativos que nos permitan medir su evolución diacrónica. En este sentido, la experiencia de parte del equipo de la cátedra en proyectos de investigación regionales y nacionales que tenían como objeto medir niveles de capital social es un factor muy positivo.
Por otro lado, dicha experiencia investigando en el ámbito rural nos hace muy conscientes de la insuficiencia de un sistema de indicadores puramente cuantitativos para medir niveles de desarrollo, por lo que para completar la visión aplicaremos en dicha evaluación un sistema de investigación más adecuado basado en la triangulación metodológica, que añade investigación cualitativa (entrevistas básicamente) a la puramente cuantitativa, así como grupos de discusión para contrastar los resultados.
Este planeamiento, convertir la evaluación de la cátedra en un proyecto de investigación, tiene la doble ventaja de generar, por una parte, una información mucho más completa sobre el éxito de las iniciativas planteadas y, por otra, permite la generación de una producción científica que puede contribuir a profundizar en la identificación de los obstáculos y la redefinición de nuevas estrategias con visión territorial frente al reto demográfico.